Por Javier Carrizo
IG: nada_pasara
Ficha Técnica:
Director: Dóminik Moll /Guion: Gilles Marchand, Dóminik Moll./ Música: Olivier Marguerit/ Fotografía: Patrick Ghiringhelli
Reparto: Bastien Bouillon, Bouli Lanners, Théo Cholbi, Johann Dionnet, Thibaut Evrard, Julien Frison, Paul Jeanson, Mouna Souale
¿No es raro que sean los hombres quienes asesinan a las mujeres y que sean los hombres los que las defienden? Le pregunta el único personaje femenino (Mouna Soualem) de ese departamento policial judicial, a Yohan (Bastien Bouillon), el joven investigador recién ascendido a jefe, que cumple el rol de ser el protagonista del nuevo film de Dominik Moll.
En el día internacional de la mujer trabajadora, el festival de cine francés nos invita a presenciar una película en la cual un grupo de policías franceses investigan ni más ni menos que un femicidio.
Presentada en noviembre pasado en el 37mo Festival Internacional de Cine de Mar del Plata en la sección Nuevas Autores-Nuevos Autores, la coincidencia se explica porque justo en el día mencionado, el sucedáneo francés la presenta como su primera película, por ser la más premiada del cine de ese país del pasado año.
En las diez nominaciones que tuvo para los Premios César, obtuvo seis de ellos, incluyendo el premio a Mejor Película, Mejor Dirección y Mejor Actor, entre otros.
Basada en los hechos reales que la ficción interpreta a partir del diseño de su director, el film narra con solvencia y compromiso, la búsqueda del asesino de Clara Royer, una joven que después de salir de la casa de su amiga Nanie, fue prendida fuego luego de ser rociada con gasolina, la noche del 12 de Octubre de 2016, en un barrio de las afueras de Grenoble, Francia.
A partir de allí, la incesante pesquisa encuentra diversas pistas que siempre parecen acercar a los investigadores con el asesino. La esperanza se dilata con el correr de los minutos, pero también se mantiene intacta hasta el fin de la cinta, lo que señala un mérito para el director, por construir un suspense propicio a través de las herramientas del artilugio.
Es en ese terreno audiovisual, en el que el lenguaje connota un esfuerzo cada vez mayor de su protagonista, a partir del ciclismo como hobby, para girar y/o dar vueltas en un velódromo que se presenta como interminable, al igual que la causa que él mismo intenta resolver.
La denuncia que se sintetiza con la pregunta del único personaje femenino de la fuerza, hace pensar y reflexionar a todo un país, y nos demuestra a los que vivimos en el sur del mundo, que la inseguridad no es exclusiva de estas tierras.