Retrato de una ausencia
por Vanina Suárez
vaninagsuarez@gmail.com
Puntaje: 8/10
Origen: Brasil
Ficha técnica:
Dirección: Petra Costa/ Guion: Petra Costa,Carolina Ziskind /Música: Fil Pinheiro/ Fotografía:Janice D’Avila, Will Etchebehere, Miguel Vassy/ Reparto documental: Intervenciones de Elena Andrade, Li An, Petra Costa/ Productora: Busca Vida Filmes
Elena es un documental del año 2012 dirigido por Petra Costa pero que fue incorporado al catálogo de Netflix no hace mucho. Cuenta con el actor Tim Robbins (Rio místico, Sueños de libertad) y el director brasilero Fernando Meirelles (Ciudad de Dios, Los dos papas) como productores asociados y, además, ganó como mejor film documental en el festival de La Habana.
Cuando te dicen que en la película la directora narra la historia de su hermana años mayor que ella, quizás digas: -¡Otra vez no! historias personales autorreferenciales que ponen a un familiar de turno y lo endiosan con el poder que una cámara cinematográfica les da. Pero este trabajo rompe todas esas falsas reglas: Petra, directora y hermana de Elena, sigue sus pasos y relata con una voz en off recorriendo la ciudad, sus noches, lugares a los que podría haber ido. Maneja la cámara como un testigo de lo que fue y de una manera conmovedora.
Elena era una joven artista brasilera que decidió ir a probar a suerte a los EEUU como actriz. Su deseo de llegar a Hollywood fue muy fuerte y lo tuvo en claro desde pequeña, pero el camino no le resultó fácil y una fuerte depresión se apoderó de ella hasta llegar al suicidio. Si digo esto no estoy contando la historia en sí misma porque eso lo podremos percibir desde el principio.
Petra y Elena son dos hermanas, hijas de una socióloga dueña de un periódico y un político en Belo Horizonte. El documental reconstruye la identidad de Elena y en algún punto la historia familiar, desde cuando tomó la iniciativa de dejar Brasil para cumplir sus sueños y por cada una de las situaciones que fue atravesando. Para ello se utiliza el material de archivo y la voz de Elena grabada en pequeños cassettes que oficiaban de cartas cuando ella vivía en el país del norte. Además, cuenta con los testimonios de amigos y su propia madre, recorriendo lugares y espacios para construir quién fue Elena.
Este es un documental del estilo de Silvia, el trabajo argentino de la directora María Silvia Esteve, donde a través del relato de vida de su madre logra traspasar barreras familiares para contar una historia tan personal. Costa consigue con mucha fuerza visual relatar las ausencias, el duelo, lo inexplicable. Reflexiona sobre la culpa de los que quedan vivos y el inolvidable recuerdo del pasado enfrentando el tormentoso presente que llevo a Elena a su trágico final. Se mete de lleno en una tragedia propia y realiza un paralelismo con su vida actual, teniendo la misma edad que su hermana al fallecer y cumpliendo sueños, muchos de ellos son los que no logró realizar Elena. Ese trabajo casi de espejo, de reflejo en un ser querido que no está, es el hilo conductor del documental. Denotando la analogía de las imágenes como las de tren al inicio, dando a entender que la vida es un andar en rieles, que sigue a pesar de todas las dificultades.
No hace falta ser Petra para sentir a Elena cercana y sufriente, no es necesario que sea nuestra hermana para que podamos observar una vida aniquilada por la frustración. El acierto de la directora está justamente en eso, hacer de algo tan personal un hecho en el que otros puedan sumergirse, aun cuando los invada la melancolía.
Elena es un trabajo lleno de simbologías y poesía visual. Una película conmovedora y nostálgica que es imposible no toque las fibras de cualquier espectador.