Por Leny Pereiro
Ig: @lenypereiro_ok
FICHA TÉCNICA
Título original: The Son/ País: USA, Francia, Reino Unido.
Productora: Embankment Films, Ingenious Media, Film4, Cross City Films, See-Saw Films, IntoTheVoid.
Director: Florian Zeller/ Guión: Florian Zeller, Christopher Hampton.
Reparto:
Hugh Jackman, Laura Dern, Vanessa Kirby,
Anthony Hopkins, Zen McGrath, William Hope, Akie Kotabe, Danielle Lewis, Nancy Baldwin, Reza Diako, Julia Westcott-Hutton,
Rene Costa, Kenny-Lee Mbanefxo.
Duración: 123 minutos.
No voy a hablar de El Hijo en comparativa con su predecesora El Padre – del mismo director pero sin temáticas ni línea argumental que las emparente – porque perdería ostensiblemente. Lo único que voy a decir es que las une Florian Zeller, quien las dirige, y el abordar, cinematográficamente, problemáticas intrafamiliares que provienen de obras teatrales.
Con un tono moderado, casi susurrante en su mayoría, y una construcción por escenas, la película transcurre. Se relata a sí misma en diálogos que van desarrollando el conflicto.
Los matices son pocos, especialmente destacados en las secuencias más álgidas, con las actuaciones de Hugh Jackman (Peter, el padre) y Zen McGrath (Nicholas, el hijo) como las más destacables, aunque a veces un tantín estereotipadas, incluso en sus decires.
No voy a contar su argumento, hay sobradas reseñas para esto. Pero lo que sí voy a decir es que es un drama terrible, con un final previsible, que no logra conmover con la profundidad y el desgarro que merece.
Que es opaca más allá de su temática, que no cala. Y que con un material tan poderoso y terrible, se podría haber logrado algo que fuera – al menos- un poco más allá de lo linealmente correcto.
El elenco principal lo completan, bien pero sin estridencias ni resaltes, Laura Dern (Kate, la madre), Vanessa Kirby (Beth, la nueva esposa del padre), y Anthony Hopkins (el padre del padre) participando este último en una sola escena con un papel casi siniestro, y con una reminiscencia final y fugaz en su composición de su terrible Hannibal Lecter.
Hay en la película un personaje que dice que «muchas veces con el amor no alcanza», y es dolorosamente cierto. En este caso agregaría que con la intención mesurada, tampoco.
Pero, como siempre digo, nadie mejor para juzgar una película que nosotros mismos.