Por Vanina Suárez
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Ficha técnica:
Dirección: Martín Heredia Troncoso/ Asistente de dirección: Mariel Escobar/ Guion: Federico Alvarado y Martín Heredia Troncoso/Producción: Ana Eva Mocayar/ Dirección de producción: Florencia Román/ Jefa de producción: Ana Lucia Frau/ DF: Sebastián Nicolás Aramayo, Juan Samyn/ Montaje: Guillermina Chiariglione/ Dirección de sonido: Juan Ignacio Giobio e Ignacio Seligra/ Música: Anselmo Meliton Cunill/ Dirección de arte: Ana Fernández Comes/ Vestuario: Sol Muñoz/ Maquillaje y peinado: Melina Elizabeth Araya.
Reparto: Eva Bianco, Ricardo Adán Rodríguez, Pablo Limarzi
Origen: Argentina
Duración:82 minutos
Quizás Bajo la corteza sea más vigente hoy que en el momento en el cual fue pensada y hasta filmada. Al ingrediente de ser una buena película se la suma una actualidad que la acompaña y hace que tome una dimensión impensada.
César Altamirano (Ricardo Adán Rodríguez) es un empleado rural que vive en las sierras de Córdoba y en un momento de escasez laboral busca desesperadamente una changa para poder solventar sus gastos. Su especialidad es el desmonte de bosques y recurre a varios conocidos para obtener, aunque más no sea, un trabajo esporádico que lo ayude a salir de su extrema situación. Con una única hermana como sostén, que además mantiene a su propio hijo, César se topa con Zamorano, un empresario inmobiliario que le asigna ciertas tareas. El empleador y empleado comienzan a entablar una situación laboral y de confianza, donde claramente el poderoso «ayuda» a César y este mantiene una deuda constante con él. Es allí cuando Zamorano le solicita que intervenga en un bosque donde necesita comenzar un negocio inmobiliario.
La película, sin mayores juzgamientos, se centra en el punto de vista de observar a César y la necesidad que lo circunda, agobiado por la situación y un entorno familiar que lo desborda. ¿Qué hay debajo de la corteza?, esta frase no solo hace referencia al bosque, quien a veces pareciera ser un personaje más en la historia, una víctima de quienes lo toman como dueños, también intenta plasmar qué hay debajo de la «piel» de las personas.
Martín Heredia Troncoso muestra en esta película un camino prometedor que recién comienza, no solo con una historia potente y bien construida sino con la pertinente elección de actores, ya que Ricardo Adán Rodríguez tiene un gran desempeño actoral logrando componer a César un ermitaño serrano que muestras varias aristas; una siempre cumplidora Eva Bianco y un real villano de la mano de Pablo Limarzi. Otro hallazgo importante es la elección de la contemplación de César, quien en su vida cotidiana se puede plasmar la tranquilidad de las sierras, de la naturaleza y cuando se ve inmerso en una encrucijada, la furia es latente y demoledora en pantalla; es allí cuando el relato toma aún más potencia.
Bajo la corteza trae a la pantalla grande un tema vigente y doloroso, además de mostrar el poder que algunas personas ejercen sobre quienes más lo necesitan. Al guion sólido se le suma una dirección de fotografía impecable y una dirección de sonido que acompaña, muchas veces con lo que calla, al dolor que el bosque (y todo lo que se genera a su alrededor) grita por sus costados.
