Por Leny Pereiro
FICHA TÉCNICA:
Argentina-Chile-Estados Unidos/2023
Dirección: Lucía Puenzo.
Elenco: Mariana Di Girolamo, Germán Palacios, Guillermo Pfening, Osmar Nuñez,
Malena Sánchez, Moro Anghileri.
Guion: Lucía Puenzo y Lorena Ventimiglia.
Fotografía: Nicolás Puenzo. Edición: Misael Bustos.
Música: Andrés Goldstein y Daniel Tarrab.
Sonido: Fernando Soldevila. Producción: Historias Cinematográficas (Argentina).
Productoras asociadas: Non Stop Studios (Argentina) y Exile Content Studio (Estados Unidos). Coproductora: Fábula (Chile).
Duración: 90 minutos.
Esta quinta película de Lucía Puenzo se inicia con una joven veterinaria (Ada/Mariana Di Girolamo) que, asistiendo el parto de una vaca en medio de una tormenta inminente, recibe el impacto de un rayo que no la mata, pero la deja marcada de muchas maneras distintas, y más allá de las cicatrices palpables.
A partir de allí, sus percepciones cambian. Y es contactada por un médico (Juan/Germán Palacios) que, habiendo sufrido la misma conmoción, lidera y ayuda a un grupo de impactados con métodos muy poco convencionales.
Mas esto es sólo una excusa, un recurso muy original desde el punto de vista del guión, para contarnos un proceso de sanación, donde la electricidad es el camino para lidiar y comprender los estados de ánimo (y del alma) que nos atraviesan en todos los sentidos vitales.
Desarrollada en una mezcla de géneros muy interesante, sólo decae en el tono elegido para los personajes que se siente bastante pesado y forzado en sus diálogos solemnes y poco fluidos. Pero aún así, la directora logra desarrollar una historia potente.
Y aunque tal vez también exista un exceso de «traumas» a resolver, demasiados frentes a batallar que de distintas formas la deja corta, cabe destacar que el excelente tratamiento visual la compensa en un plus que refuerza certeramente lo que nos quiere decir.
Las actuaciones de sus protagonistas y co-protagonistas son muy destacables, aún dentro de ese tono impuesto que, a mi juicio, las vuelve un tanto monocordes y artificiales, restándoles matices.
Mi recomendación es, definitivamente, verla, por varios motivos, pero el más importante quizás para mí, es que aunque termine aproximándonos a reflexiones conocidas, esa mixtura de fantasía y drama en toda su composición, la vuelve efectiva e inusualmente original y moderna.