Por Javier Carrizo
Fumar provoca tos (2022) de Quentin Dupieux
FICHA TÉCNICA:
Título original: Fumer fait tousser Año: 2022 Duración: 73 min. País: Francia Género: Comedia. Fantástico | Comedia absurda. Surrealismo. Superhéroes Dirección: Quentin Dupieux Guion: Quentin Dupieux Reparto: Gilles Lellouche, Vincent Lacoste, Anais Demoustier, Jean-Pascal Zadi, Oulaya Amamra, Adéle Exarchopoulos, Benoit Poelvoorde, Doria Tillier, Blanche Gardin, Grégorie Ludig, David Marsais, Anthony Sonigo, Julia Faure. Fotografía: Quentin Dupieux Compañías: Chi-Fou-Mi Productions, Gaumont, Canal+, Orange Cinéma Séries, Télé Monté Carlo. Distribuidora: Gaumont
ESTRENO INTERNACIONAL Finalmente y después de idas y vueltas, llega a algunas pocas salas de Buenos Aires, la desopilante y amena Fumar provoca tos, luego de su extenso paso por festivales internacionales extranjeros y ciclos (también en el ámbito nacional como es en el caso del “Festival de Cine Francés”, y la reciente última edición de “Hora Cero” en el Cine Gaumont). La estrenada en su país durante Noviembre de 2022, es una comedia absurda y ligera con ciertas distinciones de cine de terror, que adquiere el tono del resto de la filmografía del impío realizador francés. En la película, los Tabaco Rangers (un singular grupo de superhéroes que desprenden nicotina y otros agentes nocivos desde sus puños), se enfrentan en un trivial combate con una tortuga monstruosa. El jefe de estos, (una mezcla de “Carozo y Narizota” con el “maestro Splinter”), les ordena que se retiren para que su comando recupere la seguridad a través de un encuentro más espiritual. Todo transcurre con normalidad, mientras el espectador en un cómodo apelmazamiento narrativo obtiene más información acerca de los protagonistas, pero algo malo sucede, Lézardin, el emperador del Mal, decide aniquilar el planeta Tierra. Los disímiles géneros que se cohesionan y desencadenan en el agradable audiovisual, implican desde críticas ambientales, asuntos relacionados a la imagen que las sociedades tienen de las relaciones humanas y su propia cultura, de las parodiadas temáticas ambientales que se imprimen en los diálogos, y de la acusación hacia el capitalismo, que concientiza desde su manera y lenguaje. Fumar provoca tos se comprueba como una saludable práctica para ser presenciada en el cine, en una nueva oportunidad para conocer a un cineasta que en los últimos años superpuebla de producciones propias los festivales y circuitos de exhibición de todo el mundo.